¡¡Buenos día a todos!!
Ayer ya os conté que celebrábamos nuestro día grande, el día
del Viejo. Quiero resumirlo y quiero resumíroslo con el bonito cuento que le
conté a vuestras hijas. Dice así:
“Érase que se era, por el año 2015, un grupo de niñas que no
tuvieron la suerte de contar en sus días de campamento ni los que les restan al
año con un gran hombre, con un Viejo que era mas joven que todas esas niñas y
niños con los que convivía, formaba y animaba
diariamente. Se trata de Antonio Gutiérrez Medina, una persona con
paciencia de santo y agrado de hombre bueno. Un hombre que desde su silla
observaba a cada una de las niñas que
pasaban por aquí, y era capaz de decir cuando estabas triste o si tenías un día
gris. Que desde en el mercado se escondían cada vez que aparecía por allí
porque sabía que algo les sacaba seguro. Que su siesta detrás de la capilla era
sagrada, que disfrutaba disfrazándose de mujer, y que incluso a algunas llegó a
quitarles el luto con vestidos de mercadillo. Pero ante tanta anécdotas hay una
que lo hacía único, hacía sentirse especial a cualquier persona que estaba a su
lado.
Me gustaría que todo el esfuerzo y tiempo que el Viejo
invirtió en nosotras no quedara en una simple historia que contemos de año en
año. Sino que entre todas valoremos, agradezcamos, respetemos y cuidemos todo
lo que él hizo por nosotras sin aún conocernos.
Solo espero, que desde arriba te sientas orgulloso con el
trabajo que estamos haciendo los que hemos recogido tu testigo. Y que de una manera u otra sigas guiándonos y
dándonos fuerzas para que esto nunca se pierda”.
Hoy más que nunca,
SIEMPRE UNIDA.
Pda.: Por la tarde, fue el momento del G.8, por primera vez
hacía un juego y tengo que decir que apuntan alto! Con su “Wassabi´s Party” nos
hicieron cantar, reír, ensuciarnos y sobre todo ¡pasarlo genial! ¡Enhorabuena
chicas!
Que emotivas palabras! Yo también fuí una de esas niñas que recibió cariño del viejo y le estoy inmensamente agradecida. Hoy, veinte años después, es mi hija la que recibe su esencia y sigue disfrutando de esta experiencia tan positiva que le ayuda a encontrarse y formarse como persona.
ResponderEliminarEsto no sería posible sin vosotras, las monitoras y toda la gente que está detrás... Gracias por vuestra entrega y dedicación y por hacernos llegar cada día un poquito de allí, que hace que, aunque echemos de menos a nuestras hijas, sepamos lo agusto, felices y seguras que están.
Besos para todos desde Úbeda!!!!